viernes, 28 de febrero de 2014

28 de Febrero 2014


Se van a cumplir 34 años de aquel 28 de febrero, a pesar de las preguntas enrevesadas y casi incompresibles, las trabas legales e informativas, en el que cerca de 2.500.000 de andaluces consiguieron vencer en las urnas, con su voto afirmativo, la obcecación de un gobierno que pretendía mantener a Andalucía atrasada y sumisa.
Esa victoria, que fue el sueño de otros (en su inmensa mayoría radical-republicanos), retomado con fuerza durante la República y condenado al ostracismo por el golpe de estado que dio lugar a duros años de dictadura, hizo resurgir con fuerza y esperanza la idea de una Andalucía libre.
34 años después los problemas siguen siendo los mismos, es cierto que hemos avanzado, pero esos avances siguen siendo insuficientes. Necesitamos mayor autogobierno para profundizar en nuestros problemas y tratar de atajarlos con nuestros medios y depender de las migajas del gobierno central de turno.
No pedimos la independencia, exigimos mayores cotas de soberanía, somos federalistas y, como tales, creemos que son las Comunidades las que deben de delegar en el Estado aquellas funciones que crean conveniente y no al contrario. Es por ello, que nos asombra Susana Díaz en sus declaraciones a cerca de Cataluña y España no aclarando aun cual es su modelo de Estado, lo que lleva a una indefinición del propio modelo andaluz.